
En un anuncio revolucionario que ha sorprendido a toda la industria del entretenimiento, los íconos de Hollywood Roseanne Barr, Mark Wahlberg y Mel Gibson han unido fuerzas para fundar lo que orgullosamente llaman el primer estudio cinematográfico “anti-woke”. Sí, leyeron bien: tres veteranos de la industria, con una larga trayectoria de controversia, ahora se enfrentan a lo que perciben como la opresiva cultura de la “conciencia” en Hollywood.
El trío, aparentemente cansado de ser marginado por la “cultura políticamente correcta” y las “turbas de la cancelación”, declaró su misión de recuperar el “entretenimiento de verdad”. ¿Qué significa eso exactamente? Según su comunicado de prensa, se trata de una “narración cruda y sin filtros que no se incline a las agendas convencionales”. Sin embargo, los críticos ya especulan que podría significar simplemente monólogos de una hora sobre “cómo las cosas eran mejores en los viejos tiempos”.

El nuevo estudio, cuyo nombre provisional es Unapologetic Films , promete producir películas y programas que “no se doblegan ante las presiones sociales”. Traducción: esperen una programación que probablemente incluya una nueva versión cruda y nada irónica de Leave It to Beaver y un documental sobre cómo los trofeos de participación destruyeron la civilización.

Las redes sociales estallaron a los pocos minutos del anuncio. Los partidarios elogiaron la audaz decisión, calificándola de “victoria para la libertad de expresión”, mientras que los detractores no pudieron resistirse a señalar la ironía de un estudio “anticensura” creado por tres celebridades que parecen dedicar más tiempo a quejarse de Hollywood que a trabajar en él.
En cuanto a la financiación, fuentes internas sugieren que Wahlberg aportará el dinero —presumiblemente de las ganancias de su cadena de hamburguesas—, mientras que Gibson asumirá el liderazgo creativo. El puesto de Barr, por su parte, parece ser el de “Estratega Jefe de Twitter”, a juzgar por su reciente oleada de publicaciones con hashtags como #WokeNoMore y #MakeHollywoodGreatAgain.

Está por verse si esta aventura prosperará o fracasará, pero una cosa es segura: el mundo del entretenimiento se ha vuelto un poco más… entretenido. O al menos, divertidamente caótico. Estén atentos a la primera lista de proyectos, que, si los rumores son ciertos, podrían incluir una secuela
de Braveheart titulada
Still Brave, Still Hearting .